La gran eficacia de esta metodología es que está orientada a los resultados, las soluciones y los potenciales, en lugar de enfocarse en los problemas. El objetivo es que la persona conozca su talento interior y se haga autosuficiente.

El Dibugrama permite conocer nuestros mecanismos internos. Lo efectivo es que determina el punto emocional personal en que se puede transformar la debilidad en fortaleza, la incomprensión en entendimiento, la indecisión en seguridad y la confusión en maestría. Cada persona tiene un punto reactivo en el que se siente débil e insegura. Ese es el punto de ajuste del talento personal. Es al mismo tiempo un punto limitador y de expansión.

La psicología transpersonal observa una visión amplia de lo psicológico incluyendo facetas de la experiencia y comportamiento humanos relacionadas con una percepción holística de la salud y el bienestar. Percibe a la persona como un todo influido a diversos niveles, no únicamente en el que entendemos tradicionalmente como psicológico o emocional.

En este sentido abraza un enfoque más trascendental o espiritual nutriéndose tanto de la ciencia occidental como de la sabiduría oriental en lo que se refiere a la realización de los potenciales humanos.

Lo transpersonal tiene un claro enfoque en la conciencia y en la observación. La psicología transpersonal es una indagación sobre la naturaleza esencial del Ser.